La Isla de Formentera cuenta con una gran cantidad de posidonia, una planta marina que cuando se seca se amontona en las playas. El arquitecto Carlos Olivé ha llevado a cabo un proyecto LIFE de El IBAVI (Instituto Balear de la Vivienda) para utilizar la posidonia como aislante natural en un proyecto de construcción de viviendas sociales. De este modo ha conseguido reducir un 60% las emisiones, un 70% el consumo energético un 60% el de agua. Este proyecto cofinanciado por la UE ha recibido el premio LIFE en la categoría de Medio Ambiente.