«Nukoko» significa sonreír en ewé, la lengua de Aklobotonu, un pueblo del este de Ghana que Mar y Andrea Doreste conocieron en 2018. Ante una realidad injusta, las hermanas Doreste fundaron Nukoko, una ONG basada en el trabajo cooperativo que cuenta con gente del lugar, los verdaderos héroes, que trabajan para que los proyectos de desarrollo sean autosuficientes y sostenibles en el tiempo.