Trituramos la crema de boletus, las patatas hervidas que no hemos utilizado para la crema y 120 g de mantequilla y mezclamos medio kilo del resultado con la metilcelulosa para hacer una masa que reservaremos 24 horas en la nevera a fin de que la metilcelulosa se hidrate.
Con la ayuda de una manga pastelera cubrimos la base y las paredes de una flanera y la rellenamos con la crema de queso de Mahón y una yema de huevo.
Cerramos el coulant con más masa de boletus.
Lo cocemos 6 minutos al horno a 180 °C para que la metilcelulosa gelifique pero procurando que la yema no se cuaje.